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La dieta, ¿el cuerpo que deseamos o el que necesitamos para sobrevivir?


Si alguna vez has estado en “lucha” contra el sobrepeso (en mayor o menor medida) sabes perfectamente lo que significa la palabra DIETA y lo que genera en ti. ¿Pero sabes las implicaciones a nivel inconsciente y biológico que esto conlleva? Sigue leyendo y encontrarás las respuestas.


Soy Terapeuta en Descodificación Biológica con especialización en Trastornos alimenticios, Obesidad y Sobrepeso en el Instituto Angeles Wolder y he aprendido a generar una mirada biológica ante cada síntoma, y el sobrepeso u obesidad no es la diferencia.

Cuando descubrí la siguiente frase, comprendí a profundidad el trasfondo Biológico:

“No tenemos el cuerpo que deseamos, si no el que necesitamos para sobrevivir”

Así es que me atrevo a decir que, si el cuerpo que tienes no es el que deseas, hay algo más que comer sano o hacer ejercicio que debes revisar en ti.

Cuando nos sometemos a una dieta, ya de por si pasamos por un estrés previo: no nos sentimos saludables con el peso que tenemos, no nos gusta cómo nos vemos, o peor aún, tenemos ya alguna enfermedad o síntoma a consecuencia de ello. Vemos a la dieta como una solución a recuperar ese estado que ya no habita en nosotros. Pero la noticias es que para nuestro inconsciente la palabra dieta puede ir más allá de una “solución” y generar aún más estrés.

¿Qué hay detrás de la palabra dieta para ti?, cuando le pregunto esto a mis pacientes suelen nombrar cosas como: hambre, ansiedad, frustración por no poder comer lo que quieren, fatiga, poca energía, estar de malas, etc. Y cuando nuestro inconsciente, que es completamente biológico, reconoce estrés en este proceso, ya no vamos por buen camino.

La palabra “dieta” o “estar a régimen” puede conllevar a un mensaje inconsciente de estar en periodo de inanición (real, simbólica, virtual o imaginaria). Nuestro cerebro, que es muy eficiente más no inteligente, querrá poner una solución a este estrés o conflicto. Y lo hace de maneras que quizá ya has experimentado:

  • Recuperando el peso perdido, después de haber alcanzado el objetivo. Ejemplo: Las dietas yo-yo.

  • Generando ansiedad que se traduce en más hambre.

  • Periodos depresivos, baja motivación y energía.

  • Ataques de ira-agresividad.

  • O poniéndose en modo “ahorro” bajando el metabolismo para no gastar sus reservas.

  • Entre otras….

Y estos “síntomas” que tu biología activa como “soluciones” ante el estrés de la dieta, no te ayudarán a lograr tu objetivo, o el proceso te será aún más complicado de lo que podría ser.

Cabe resaltar, que el tema no es qué tipo de dieta eliges seguir (que no es menos importante) si no la manera en la que vives el proceso y lo que significa para tu cuerpo (el trasfondo emocional, psicológico y biológico). Porque una manera de comer saludable, a veces no es suficiente para regresar al peso sano.

La invitación está en revisar en tu interior. No basta saber cómo se debe comer adecuadamente y la voluntad de querer estar saludable o verse bien. No se puede hacer un cambio tan importante de hábitos desde la fuerza de voluntad, el cambio debe hacerse desde la emoción, un cambio interior profundo con todo lo que está ligado.

Un verdadero cambio, también implica una nueva manera de vivir, de relacionarte con la comida y de solucionar el verdadero origen del sobrepeso. Una dieta, se hace por un corto periodo de tiempo, un sistema de nutrición se vive y se disfruta toda la vida, y lo mejor, es que no genera estrés mental, emocional o biológico.

Si quieres más información al respecto:

Saludos!

Leslie Villatoro.

Terapia Holística.


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